Miles de militantes antiglobalización, ambientalistas, figuras del cine, científicos e indígenas de los cinco continentes se concentraron en Cochabamba para la cita convocada por Evo Morales ante el fracaso de la cumbre del clima de Copenhague y con miras a la reunión de Cancún en noviembre próximo. Pero el presidente boliviano sorprendió en su discurso inaugural al afirmar que los hombres que consumen pollos con hormonas tienen problemas con su virilidad."Los pollos transgénicos tienen hormonas femeninas, por eso los hombres que los consumen tienen desviaciones en su ser como hombres", denunció Morales, al tiempo que atacó los vasos y platos de plástico desechables como producto del "veneno" exportado por el mundo capitalista."Las empresas le ponen (a los pollos) hormonas femeninas y por eso los hombres que consumen tienen problemas en su ser como hombres... Es el Occidente que nos trae cada vez más veneno", sostuvo el mandatario. Morales mencionó que en "las mujeres el consumo de pollo transgénico provoca alteraciones orgánicas" y que, si se consumieran en 50 años estos pollos, los hombres quedarán calvos.El presidente boliviano abrió la cumbre con un "Planeta o muerte", con el alto mando militar atrás y atacando al capitalismo como el principal enemigo de la humanidad. Poco antes, la representante del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, era masivamente silbada por el público cuando leía un mensaje. La reunión alienta un referéndum global -que busca transferir gastos militares a la lucha contra el cambio climático- y un tribunal internacional para juzgar a los países que dañen a la naturaleza. Hoy, según se anunció, llegará el venezolano Hugo Chávez, y se menciona a los presidentes Rafael Correa (Ecuador), Fernando Lugo (Paraguay) y el nicaragüense Daniel Ortega entre quienes dirán presente.Unas 17 mesas tratan temas como el Protocolo de Kioto, la deuda climática de los países ricos y los mercados de carbono. Pero internamente las cosas no son color de rosa y Evo Morales vetó a la llamada "mesa 18", solicitada por los indígenas del Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qollasuyo para tratar los conflictos ambientales que vive Bolivia, especialmente a causa de la minería. Los disidentes debieron improvisar su mesa fuera del programa oficial.La gigantesca mina San Cristóbal, yacimiento de plata y zinc en manos de una empresa japonesa, se encuentra bloqueada por campesinos e indígenas que reclaman contra la contaminación y el consumo desmedido de aguas subterráneas, y demandan compensaciones económicas. Hubo saqueo de oficinas y vuelco de contenedores con minerales. También indígenas y ONGs se oponen a la construcción de represas brasileñas y a la exploración petrolera en la Amazonia boliviana.
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